Ferrari SF-25 - Gran Premio de Australia 2025

• Limitado a solo 99 piezas por piloto
• Inspirado en los coches que pilotaron Charles Leclerc y Lewis Hamilton en el Gran Premio de Australia Louis Vuitton, disputado en el Circuito de Albert Park el 16 de marzo de 2025
• Cada modelo está hecho a mano y ensamblado por un pequeño equipo de artesanos
• Modelo a escala 1:8, de más de 70 cm/27 pulgadas de largo
• Fabricado con materiales de la más alta calidad
• Más de 2500 horas de desarrollo
• Más de 250 horas de construcción de cada modelo
• Miles de piezas de ingeniería precisa: piezas fundidas, fotograbados y componentes metálicos mecanizados por CNC
• Construido con diseños CAD originales y códigos de pintura proporcionados por la Scuderia Ferrari

El SF-25, competidor de la Scuderia Ferrari HP para la temporada 2025 del Campeonato Mundial de Fórmula 1 de la FIA, buscaba construir sobre la plataforma de su predecesor, el SF-24, ganador de múltiples carreras. Con Charles Leclerc entrando en su séptima temporada con el equipo y la sonada llegada de Lewis Hamilton, quien acaparó titulares mundiales al dejar Mercedes tras 11 años para fichar por Maranello, el SF-25 impulsó el rendimiento de Ferrari en 2024, donde terminó a solo 14 puntos de McLaren, eventual campeón.

Desarrollos técnicos

Presentado en el evento de lanzamiento del F1 75 el 18 de febrero en el O2 Arena de Londres, el SF-25 fue el 71.º monoplaza de Fórmula 1 fabricado por Ferrari. Si bien fue el cuarto de la segunda generación de monoplazas de efecto suelo, introducidos en 2022, representó un rediseño completo, con soluciones técnicas distintas a las adoptadas en el pasado. El cambio más visible fue la transición de una suspensión delantera de varillas de empuje a una de varillas de tracción. Este cambio arquitectónico buscaba mejorar el flujo de aire alrededor del monoplaza y brindar mayores oportunidades de desarrollo aerodinámico, que se habían agotado en gran medida en el modelo anterior. El SF-25 representó una evolución en todos los aspectos en comparación con el monoplaza del año anterior, ofreciendo una base sólida para la mejora. Fue diseñado para maximizar el potencial de desarrollo en una temporada en la que, debido a la estabilidad de la normativa al entrar en su último año, se esperaba una competencia notablemente reñida, con apenas milésimas de segundo de diferencia entre los tiempos de vuelta. Si bien el motor no introdujo innovaciones revolucionarias, se optimizó aún más para obtener el máximo rendimiento. Garantizar la confiabilidad siguió siendo un esfuerzo constante; durante el invierno, a pesar de la reducción de las horas permitidas de funcionamiento del banco de pruebas, se realizó un trabajo importante para analizar y perfeccionar cada proceso en función de las lecciones aprendidas de la temporada 2024, garantizando la solidez de todos los componentes.

Una nueva y llamativa decoración

La decoración del SF-25 experimentó una impactante transformación, combinando a la perfección elementos del pasado, el presente y el futuro, con una declaración de estilo, potencia y tradición. El tono más oscuro del Rojo Racing 2025, con su acabado mate, evocaba décadas de competición, inspirándose en los intensos tonos de los primeros coches de la Scuderia. Una audaz banda blanca en ángulo adornaba el coche de forma prominente, simbolizando dinamismo y una visión de futuro. En el esquema de colores principal, unas sutiles y finas franjas rojas y blancas brillantes introdujeron un equilibrio entre tradición y modernidad, que evocaba el cuidado sartorial aplicado a la ropa y los coches que Ferrari produce a diario. El contraste entre el blanco y el rojo era un homenaje a la historia e identidad de la marca, y a la continua evolución del estilo Ferrari, un manifiesto de deportividad refinada y estética atemporal. Cabe destacar que los detalles brillantes de la carrocería contrastaban con los detalles mate del acabado brillante del hipercoche 499P, que competía en el Campeonato Mundial de Resistencia, lo que subrayaba el ADN de Maranello que compartían ambos coches que competían en los campeonatos de automovilismo más importantes. Las llantas también eran completamente rojas, mientras que los números de los coches de Charles y Lewis eran blancos, con la fuente oficial de Ferrari, Ferrari Sans.

El Ferrari SF-25 está limitado a solo 99 piezas por piloto a escala 1:8.